La verdad es que cuando nos encontramos residiendo en una ciudad fuera de nuestro país, no prestamos atención a esos pequeños detalles que encierra el hecho de tomar una cámara de fotos y andar por esa ciudad como una especie de turista accidental -o incidental-, a la par que uno se deleita tomando diversas instantáneas de las zonas, lugares, edificios o aspectos más reseñables de dicha ciudad.
Ese ha sido mi caso al residir en Cracovia ya hace algún tiempo. No me había planteado hasta la fecha el hecho de que, a pesar de que ya es una ciudad muy conocida para mí, muchas de las personas que hablan conmigo, que me escriben o me llaman por teléfono, no han visto Cracovia ni han tenido la oportunidad de apreciar su belleza.
En parte, para compartir esa belleza urbana, en parte para que la gente se haga una idea de donde estoy, a principios del mes de julio decidí dar varios paseos de fin de semana, cámara en ristre, por la zona del antiguo barrio judío de la ciudad (Kazimierz) y por la zona del castillo de Wawel, a fin de retratar los aspectos más reseñables del mismo.
Así que inmortalicé diversas partes del mismo para vuestro deleite, ofreciendo las distintas imágenes a continuación: