6.12.07

¡Ay, qué pereza!

Ha pasado más de un mes desde la última vez que escribí en el blog, y la verdad es que han ido sucediendo cosas que, bien por la cotidianeidad con las que ya las veo, bien porque me parecían poco destacables, las he ido apartando en el cajón de los recuerdos, si bien, como contrapartida, provocan reacciones negativas, como, por ejemplo, el que queden en el olvido...

Precisamente, para que eso no ocurra, hay que rescatarlas de ese apartado ápice de memoria que va quedadndo, y a partir de ahí, desarrollarlas en la medida de lo posible de la forma más certera y veraz, aunque, claro, tamizadas siempre bajo esa pátina del color personal que uno da a las distintas vivencias y situaciones que acontecen en el devenir diario...

La verdad es que, estoy tremendamente agobiado de trabajo en este semestre... Eso es algo insoslayable e innegable. Con las prácticamente 26 horas semanales de carga lectiva que tengo, poco tiempo me queda para otra cosa que no sea el centrarme en preparar las clases del día siguiente y en revisar, eventualmente, los correos electrónicos, a los que asigno prioridades: primero, los de mis estudiantes externos, esos que no pueden venir a clase y a los que tienes que ir informando de la dinámica de las clases, trabajos que tienen que presentar, modalidad de exámenes, etc... En segundo lugar, los de la familia, que por algo te siguen escribiendo y llamando: no puedes mantener una situación de ausencia permanente, cuanto más supone que pueden preocuparse por algo que pueda pasar..., y que en realidad no pasa. Tercero, los de los amigos; a ellos los tengo un poco abandonados, dado que contesto cuando puedo y como puedo.

Estoy seguro de que, en especial, mi amiga Rondita tiene que estar odiándome terriblemente porque la he dejado sin noticias de su amada Cracovia, a pesar de que ella sí que me escrbe para comentarme de su última exposición de cuadros (y es que es toda una artista de los pies a la cabeza), o de mi amigo Miguel Ángel, que insiste en desarrollar con un tesón fuera de toda duda y unas energías tremendas la ONG que ha montado para ayudar a las personas desfavorecidas, y que tiene una línea de acción muy directa con el sufrido pueblo de Cuba. O mi otro amigo Miguel Ángel, que desde Madrid me tiene al día de la actualidad social y política de España, además, claro está, de sus largas llamadas telefónicas, las cuales agradezco por lo interesante de los temas y el incesante fluir de su conversación. O mi amigo Fernando, al cual echo de menos muchísimo, pero que tengo la absoluta certeza de que está estupendamente en Madrid. O mi amigo Daniel, que no deja de contarme sus devenires diarios en el mundo de la docencia universitaria y al que tengo el inmenso orgullo de tener como maestro en mi doctorado. O mi amigo Pepe, que, como siempre, vive la vida con una vitalidad (permítaseme esa redundancia) inmensa y con unas ganas de ir siempre más allá..., aunque ya es vicerrector de una universidad española.

En fin, tantas personas, tantos amigos y tantas circunstancias que, al final, uno se agobia pensando en los que están allá, a los cuales, eventualmente, puedes contestarles y que, a veces, por falta de tiempo o por la fuerza de las circunstancias, muy a pesar de uno mismo, se dejan un poco de lado...

En el post anterior hablaba de las nieves... Bueno, pues noviembre ha sido un buen ejemplo, pues ha nevado... ¡Y de verdad! Durante un par de semanas un níveo manto cubría la ciudad y hemos rondado, en ocasiones, los -13º centígrados... ¡Toda una delicia para las personas que huyen del calor! En mi caso, la cuenta se ha saldado con una tremenda gripe, una afonía de órdago y el retiro a la dulce bendición del reposo durante casi una semanita...

Pero ya pasó y recomienzan las fuerzas para seguir en la brecha. He visto que me han dejado comentarios en el post anterior. y quiero aprovechar para responderlos desde la presente entrada:

- A Abraham: por supuesto, inmediatamente pasaré a ñadir tus blogs al mío. Es estupendo ver que comienzan a darse iniciativas para dar a conocer una zona tan hermosa de nuestra provincia como es la Sierra de Cazorla, la cual desde aquí recomiendo que sea visitada, especialmente a mis amigos geólogos y geoturistas de la AGH, dado que encierra maravillas naturales de la geología dignas de estudio, además del estupendo aprovechamiento cinegético que se viene haciendo de la misma desde hace tanto tiempo y que ha servido como modelo para el desarrollo sostenible de otros parajes naturales de España. En lo personal, me alegra poder saludarte y espero que podamos mantener un contacto fructífero.

- A Ljudmila: me llena de alegría saber que hay gente que de vez en cuando le echa un ojo a mi blog para saber de Cracovia y de su día a día. Por mi parte, no hay ningún problema en que tomes mis fotografías del blog para usarlas como mejor te plazca. Esto también va por el resto de personas: no me dedico a fiscalizar mis derechos de autor ni consiento que nadie lo haga. Creo que, precisamente, los derechos de un autor son los de ser difundido de la mejor forma posible en los medios posibles: los que piensan que con eso se puede ganar dinero, se equivocan. La cultura es libre, Internet es libre y, por supuesto, mis escritos y soportes gráficos son libres.

En fin, aparte de todo eso, las cosas van marchando en la medida de lo posible. Reservaré los temas más importantes para otras entradas, a ver si así puedo poner algunas fotos interesantes, o contar algo que no haga dormir a los que me leen.

Gracias a todos por su paciencia conmigo...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

pues claro que no te odio, idiota, me encanta leer tu blog, aunque escribas de mes en mes! un abrazo!
ah!!! publica alguna fotico, que me encanta ver la ciudad de mis sueños!

Ludmila Hribar dijo...

Bien por alguien que se acuerda de sus amigos con una pizca de remordimiento sano ;)
te agradezco tu generosidad tu postura que internet es libre hurra!!! alguien que piensa asi abiertamente me parece estupendo. Gracias por anticipado por las fotos que voy a usar!!!!no puedo desaprovechar semejante oferta de tan bonitas fotos de mi querida Cracovia. Gracias.